Buen día comunidad. Les ha pasado que cuando existen cambios en nuestras actividades o sucede algo que de lo cual no tenemos control y trastorna un poco nuestra vida, sentimos la necesidad de desahogo y caemos ante la tentación de la pornografía y la masturbación. Les confieso que he pasado por eso y he tenido varias recaídas en esta seman.
Pero luego tengo el sentimiento de culpa de haberle fallado a Dios. Y aunque pienso que no tengo el derecho de poder levantar la mirada, se que el no me rechaza. Ese sentir me ayuda a fortalecerme y decirle Señor, no es con mis fuerzas, sino que tuya es la victoria y veré mi vida transformada por ti, por tu misericordia, bondad y amor hacia mi. Oremos pidiéndole a Dios la fortaleza y el dominio propio de agradarle con nuestras acciones y nuestros pensamientos. Podemos salir adelante de esto, pero no solos ni con nuestras fuerzas, sino es a través del poder de Dios en nuestras vidas. Les animo a que no desmayemos y sigamos adelante confiando que seremos vencedores por la misericordia de Dios.