Hoy me llegó este dossier de la editorial Loyola, tiene cosas interesantes y esta frase me llamó la atención: Nos gusta la comodidad. Está en nuestra naturaleza gravitar hacia lo que es familiar y reconocido.
¿Quizás por eso el Sínodo despierta tantos temores en algunas personas-sectores? ¿El miedo a lo desconocido? ¿a la novedad?